“Sino encuentras el arcoíris, ponte uno” El “tie-dye” la tendencia de la cuarentena.
Las prendas desteñidas vuelven en tiempos de crisis como símbolo de optimismo y esperanza. Las redes se llenan de ropa de colores (y de tutoriales para teñirla en casa).
Si hay un pasatiempo que compita en estos momentos con las recetas de galletas, es el de atar y teñir camisetas.
El tie-dye (que en español significa literalmente "atar-teñir"), es una técnica que tiene siglos de historia, pero con ese nombre se conoce desde 1920. Eso sumado a su espíritu DIY (‘hazlo tú mismo’, por sus siglas en inglés) lo convierten en la primera tendencia de moda surgida en la cuarentena, donde sirve para apelar al optimismo al tiempo que cumple el propósito de invertir las largas horas de confinamiento en nuevas tareas, ya sea aprender francés o a teñir camisetas.
Sin duda el recuerdo a un tiempo pasado (y mejor) influyeron a convertirse en una prenda imprescindible del armario durante el confinamiento. Si parecía imposible que pudiera surgir una tendencia en estas condiciones, ha vuelto a ocurrir.
Levantar el ánimo, celebrar la artesanía y la creatividad en tiempos en los que se mira, más que nunca, a un futuro de moda sostenible, son algunas razones más para justificar su éxito. Más aún teniendo en cuenta que no hay dos tie dye iguales y que, por tanto, se considera una herramienta para reforzar la individualidad.
El diseñador A Sai Ta, conocido por reinterpretar el imaginario asiático en Asai, la marca que ya se ha convertido en la sensación de Londres, lo idenfificaba antes de la pandemia como «reflejo de la libertad y la esperanza» asegurando que, el proceso de anudado con el que se tiñen las prendas, «provoca un acabado inesperado e incierto, como los tiempos actuales».
En el caso de las influencers, además, de captar la atención de sus seguidores, les sirve para lanzar un mensaje de optimismo, convirtiéndose en antídoto visual.
“Las ganas de ponerle colores a la vida se notan hasta en la ropa“.
